Las gafas de sol pueden ser una protección ocular fiable especialmente durante los meses de verano, aunque también pueden utilizarse durante la conducción o la práctica de deportes. Además, deben quedarte bien. Pero ¿qué hay que tener en cuenta a la hora de elegirlas?

Elige un filtro UV adecuado

El parámetro básico a la hora de elegir unas gafas de sol viene siendo su filtro UV, que protege los ojos de la radiación ultravioleta del sol, perjudicial cuando nos exponemos a ella durante mucho tiempo. Las gafas con filtro UV de alta calidad protegen contra las radiaciones de onda larga (UVA) y onda media (UVB). También existe la radiación de onda corta (UVC), pero esta es bloqueada en gran medida por la capa de ozono cuando entra en la atmósfera. 

En cualquier caso, las gafas de sol deben tener un valor de filtro UV 400 como mínimo. Así que fíjate en esta cifra como primer parámetro. Sin embargo, también debes tener en cuenta si el producto cumple la norma CEE, que indica su capacidad para absorber las mencionadas radiaciones UVA y UVB.

Valora la presencia de un filtro polarizador

Las gafas de sol no sólo protegen los ojos de los dañinos rayos UV, sino que también pueden contribuir a la seguridad vial al permitir a los conductores ver mejor la carretera a plena luz del sol. Si realmente quieres utilizar tus gafas de sol sobre todo al volante, deben tener un filtro polarizador que elimine sensiblemente los reflejos. En cuanto al diseño, estos productos no difieren de otras gafas.

Fíjate en el material de las monturas y lentes

A la hora de elegir unas gafas de sol, también hay que tener en cuenta el material de la montura y las lentes, que puede influir en la funcionalidad, pero también en la durabilidad y, por tanto, en la longevidad. ¿Qué opciones hay? 

• Material de la montura: la montura puede ser principalmente de plástico y metal. El primero es ligero, pero menos duradero, mientras que el segundo tiene las propiedades opuestas. Además, también hay gafas con montura de madera, que están ganando cada vez más popularidad.

• Material de las lentes: hay lentes de plástico, que son ligeras y resistentes a los golpes, pero, por otro lado, tienen peores propiedades ópticas y pueden rayarse. Aunque las lentes de cristal son más fáciles de romper, tienen excelentes propiedades ópticas y también son resistentes a los arañazos.

Ten en cuenta el color de las lentes

Las gafas de sol pueden tener lentes de distintos colores, lo que no sólo afecta al aspecto visual, sino también a las características prácticas. Cada color permite una visión diferente. Las lentes grises y negras son universales. Reducen la intensidad de la luz, pero no distorsionan la visión, por lo que son adecuadas para prácticamente todas las actividades. Pero ¿qué resultado dan los demás colores?

• Lentes marrones: mejoran el contraste y se recomiendan a las personas con miopía.

• Lentes amarillas y naranjas: a menudo vistas en gafas deportivas, ya que ayudan a la visibilidad en la nieve, por ejemplo.

• Lentes rojas: también esta variante es habitual en las gafas deportivas y es adecuada tanto para la nieve como para el mar.

• Lentes azules: pueden ser convenientes en caso de hipermetropía, pero afectan a la visión, por lo que no se recomiendan a los conductores.

• Lentes verdes: reducen la luminosidad, por lo que son adecuadas para todas las actividades al aire libre y también tienen un efecto positivo sobre la fatiga ocular.

Considera la posibilidad de comprar gafas de sol graduadas

Si usas lentillas, llevar gafas de sol no es un problema. Sin embargo, algunas personas no quieren o no pueden utilizar lentes de contacto. En este caso, es posible recurrir a las gafas de sol graduadas, que no son otra cosa que gafas de sol con lentes graduadas. No solo protegen de los rayos solares, sino que también sirven para corregir problemas de visión. Además, en algunas tiendas puedes encontrar gafas de sol especiales para leer.

No subestimes las dimensiones de las gafas de sol 

Por supuesto, las gafas de sol deben quedarte bien cuando las lleves puestas. Por eso, a la hora de elegir, hay que fijarse en sus dimensiones.  A este respecto, cabe mencionar tres parámetros básicos que son realmente esenciales.

• Longitud de las varillas: las varillas de las gafas de hombre suelen ser más largas que las de las gafas de mujer, que a su vez son más largas que las de las gafas de niño. 

• Anchura de la lente : es la anchura en el punto más ancho, y este parámetro también puede ser importante para que las gafas de sol le queden perfectas.

• Anchura del puente: indica la distancia entre las dos lentes y suele oscilar entre 14 y 24 mm.

Ten en cuenta la forma de tu cara

Cada persona tiene un rostro característico que la hace única. A la hora de comprar gafas de sol, también hay que fijarse en su forma, que puede dividirse en cuatro tipos básicos. ¿Cuáles son?

• Rostro ovalado: las personas con este tipo de rostro pueden elegir prácticamente cualquier gafa y no tienen que preocuparse por experimentar.

• Rostro redondo: las gafas angulares (cuadradas o rectangulares) pueden ser adecuadas, así como las gafas con montura estrecha o sin montura.

• Rostro cuadrado: también en este caso, las monturas estrechas o las gafas de sol sin montura son adecuadas, pero suelen recomendarse las formas redondas u ovaladas.

• Rostro triangular: en este caso también debes elegir gafas de sol con lentes ovaladas o redondas. 

No subestimes el diseño de las gafas de sol

Por supuesto, las gafas de sol no son sólo una protección contra los rayos UV, sino también un accesorio de moda distintivo. A este respecto, puedes tener en cuenta el color y la forma de la montura. Puede ser redonda, ovalada, cuadrada o rectangular, pero también especial (por ejemplo, de aviador o cat eye). También es aconsejable elegir en función de la edad y el sexo. Aunque también existen variantes unisex, algunas gafas de sol son adecuadas para mujeres, otras para hombres y, por supuesto, también hay una gran variedad de modelos infantiles para niños y niñas.